10.9.11

Pollo al curry.

Era una noche en la que, para variar, me fui con Anthony al barrio francés para cenar y tomar algo. Entramos en el Verre Brisé, no habíamos ido nunca antes, pero sabíamos que se comía y se bebía por unas pocas monedas. La verdad es que no me gustó desde el momento en el que puse un pie dentro, demasiado rosa para mi gusto, por no decir que estábamos a unos treinta grados en la calle y dentro del local la sensación térmica se multiplicaba. No estábamos en nuestro lugar, todo infestado de pijos degustando vinos de baja alcurnia jactándose de ser catadores expertos, sibaritas de pacotilla en bermudas y alpargatas, con sus camisas color pastel y sus colgantes de conchas de mar… en fin, creo que tomaré un poco de pollo al curry y una cerveza para empezar. Tony pidió lo mismo.

-Joder-dijo Tony mientras se palpaba el hombro derecho y el camarero nos abría las cervezas-estoy destrozado.
-¿Y eso?-contesté después de pegar el primer trago de espumosa.
-Hoy he estado ayudando a Frank, ya sabes, mi cuñado, con la mudanza.
-¡Ah, sí! ¿A dónde ha ido?
-Cerca de Argel Point. Me ha tenido cargando muebles todo el día.
-¿Argel Point? ¿Y cómo es que no habéis contratado una empresa de mudanzas?
-Cosas de Frank, decía que así la casa era más suya, como si la hubiera construido él mismo con sus manos de judío… más bien lo único que hizo fue indicarnos dónde dejar las cosas.
-Al menos te invitaría a algo, es lo típico cuando te ayudan con una mudanza ¿no?
-¿Por qué crees que estoy cenando aquí? El cabrón estará llenándose la barriga con el guiso de mi hermana mientras yo como curry barato en el antro más hortera de Nueva Orleans.
-Ya… bueno, no está mal… creo que voy a pedir otra cerveza… ¿quieres una?
-Casi mejor un poco de bourbon para aliviarme el hombro.
-Sí, bourbon… ¿por qué no? tomaré yo uno también.

Me acerqué a la barra y pedí las copas, las pagué junto con la cena y volví a nuestra mesa.

-¿No te sientes solo, Village?-me preguntó en cuanto le di su copa mientras se la llevaba a los labios.
-¿A qué te refieres?
-Bueno, ya sabes… Frank tiene a mi hermana, yo tengo a Bella, pero tú… nunca te he visto con ninguna chica en plan serio. ¿No serás…?
-¡No! ¿Yo? ¡No!-me reí-Sólo que… no sé, no estoy cómodo con pareja, demasiada presión para mí. Y no es que no lo haya probado, una vez viví con una novia que tuve allá en Louisville, pero no funcionó.
-¿Qué pasó?
-Llevábamos unos tres años saliendo, era perfecto. Ella estaba loca. Me encantaba. Nos fuimos a vivir juntos, todo siguió bien hasta que recibió una oferta de trabajo en Omaha. Se fue, sin más, sin consultarme, casi sin despedirse. Quizás por eso nunca la seguí, nunca la llamé. Tampoco lo hizo ella… ¿sabes? Creo que me tomaré otro bourbon.

1 comentario:

MIGUELo dijo...

Hay tantas que se van sin despedirse...