Es realmente escalofriante cómo, en 2001: Una Odisea en el Espacio (Stanley Kubrick, 1968), el astronauta David Bowman interpretado por Keir Dullea desconecta al superordenador HAL-9000.
HAL, había anteriormente asesinado al otro tripulante de la nave espacial Discovery para la misión a Júpiter, Frank Poole, al darse cuenta de que ambos conspiraban para terminar con sus funciones cerebrales y dejarle solamente con las meramente automáticas para poder finalizar su misión.
Kubrick trata la muerte de Poole sin música, sin sonido, únicamente la ausencia de la respiración a la que nos había acostumbrado los minutos anteriores, en cambio, Bowman desconecta a HAL de una manera fría, ignorando las súplicas mecánicas y finalizando con la tantas veces parodiada canción de "Daisy".
Lo que da realmente este tono angustioso a la genial escena son las frases que, en off, HAL emite pesadamente, frases como "Deténgase, Dave" o "Tengo miedo", de tal modo que se le da a la máquina un carácter humano.
9.11.09
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